ACAMPADA NATURISTA CON UN OJO PUESTO EN LA HIGIÉNE (BÉLGICA)

 

16 de marzo de 2022. Si has seguido nuestros últimos viajes en nuestro canal de YouTube, nos habrás visto acampando con una furgoneta en algunos lugares puramente magníficos de las Islas Canarias. Hemos acampado a pie de playa todas las noches. Cuando la gente que se aloja en sus lujosas y caras habitaciones de hotel con vistas al mar miraba por la ventana, lo primero que veía era... nuestra caravana.

No hace falta decir que acampar tiene algunas ventajas únicas. No sólo conseguimos los mejores lugares, sino que también es relativamente barato y podemos pasar nuestro tiempo muy cerca de la naturaleza. Por supuesto, esto también significa que tenemos que renunciar a la comodidad. Al final, nos alojamos en una pequeña caja con un mínimo de instalaciones. Y una de las preguntas que más hemos escuchado es ¿qué pasa con la higiene?

La higiene en un camping naturista

La verdad es que nuestra vida durante las últimas semanas habría sido bastante más higiénica si nos hubiéramos alojado en campings. Especialmente nuestra higiene personal, porque los campings tienen duchas. Sin embargo, esto no era una opción en las Islas Canarias, los pocos campings que existen estaban todos cerrados. Y probablemente no nos hubiéramos quedado allí de todas formas porque no son campamentos naturistas.

Una gran ventaja de los campamentos naturistas es que creemos que son mucho más higiénicos que los campamentos textiles. Al no tener que llevar la ropa al interior de una pequeña cabaña, ésta no se humedece y no puede caerse al suelo. Lo que significa que no pueden recoger microbios. Muchos campamentos naturistas también tienen duchas comunitarias. No sabemos si hay alguna prueba de que los espacios amplios son más higiénicos que las cabañas pequeñas, pero definitivamente se siente así. Y luego están las duchas al aire libre. No sólo se siente muy bien ducharse en la naturaleza, sino que también estamos absolutamente seguros de que esto será más higiénico que ducharse en el interior.

No llevar ropa todo el tiempo también tiene la ventaja de que tu ropa no se ensucia tan fácilmente. Es posible que reconozcas el escenario en el que te levantas por la mañana, hueles la ropa de ayer y piensas "meh, suficientemente bueno". No es que realmente huela a rosas, sino simplemente porque no quieres pasar una mañana soleada haciendo la colada en un camping. Como naturista, es probable que no hayas llevado esa ropa en todo el día de ayer, así que es más probable que siga siendo "suficientemente buena".

Higiene en la acampada salvaje

La comodidad de unas duchas decentes y unas máquinas de lavado accesibles desaparece cuando se acampa en la naturaleza. Y tenemos que admitir que, durante nuestras semanas de "vida de furgoneta", hubo momentos en los que olimos un poco más de lo habitual. Sobre todo al principio, porque todavía teníamos que aprender bastante.

Las dos autocaravanas que alquilamos tenían un depósito de agua y una manguera que funcionaba perfectamente como ducha. Sin embargo, esto requería cierta planificación. En Lanzarote y Fuerteventura, realmente no es un gran problema estar desnudo alrededor de tu furgoneta, especialmente para el par de minutos de ducha. Pero es mejor no hacerlo cuando hay demasiada gente alrededor, ya que siempre hay alguien que podría ofenderse. Así que los mejores momentos son a primera hora de la mañana o a última de la tarde. Después de la puesta de sol parecía la mejor opción al principio, pero una vez que las temperaturas empiezan a bajar, se requiere mucho más compromiso para desnudarse bajo una corriente de agua fría.

Hay, por supuesto, campistas que tienen una ducha interior y no tienen este problema. Por otro lado, las personas que acampan con una tienda de campaña probablemente no tienen la comodidad de un tanque de agua personal. Sin embargo, hay otras posibilidades. Muchas playas tienen duchas públicas que las multitudes utilizan para quitarse la arena del cuerpo. Una vez que la mayoría de la gente abandona la playa por la tarde, éstas pueden utilizarse fácilmente como una "ducha real". También puedes encontrar duchas en las gasolineras y paradas de camiones. Tienen un pequeño coste, pero al menos tendrás intimidad y (casi siempre) agua caliente.

Lavado de ropa y vajilla

El agua del depósito de nuestra caravana es limitada. Esto también es algo que teníamos que aprender. Es muy interesante lo mucho que nos acostumbramos a un suministro de agua infinito. Toda la vida, simplemente abrimos el grifo y lo volvemos a cerrar cuando estamos listos. En nuestra caravana, siempre teníamos que vigilar el nivel de agua. Había algunas opciones en las islas para comprar agua fresca, pero eran menos comunes de lo que habíamos pensado inicialmente. O de lo que esperábamos.

La mayor parte del tiempo, sólo utilizábamos el agua dulce para cocinar, ducharnos y lavarnos los dientes. Para lavar los platos y la ropa, aprendimos rápidamente que el agua del mar también funciona bastante bien. Mientras acampábamos en la playa, había un suministro interminable de agua justo delante de nosotros. Y como usamos productos para limpiar la ropa y los platos, no importaba que el agua fuera salada.

Número dos

Probablemente nuestro mayor problema al principio fue no tener un aseo. En nuestra primera furgoneta, no teníamos un inodoro. En nuestra segunda furgoneta, teníamos uno de esos inodoros químicos, pero no nos apetecía mucho usarlo. Y, sobre todo, no teníamos ganas de limpiarlo. Así que nuestras opciones eran bastante limitadas. Por suerte, hay tanta naturaleza en las Islas Canarias que siempre puedes cavar un agujero detrás de un arbusto y hacer lo tuyo. Pero por el camino, descubrimos que hay algunas opciones más cómodas.

Como no teníamos wifi ni abundancia de electricidad en nuestra furgoneta, regularmente necesitábamos pasar algún tiempo en un bar para hacer algo de trabajo. Esto era siempre una oportunidad única para utilizar también un baño de verdad. También aprendimos que la mayoría de los centros comerciales y supermercados de las islas Canarias tienen aseos gratuitos y bastante limpios. Algo que deseamos haber aprendido mucho antes fue a utilizar los aseos de los grandes hoteles. La gente de la recepción no tiene ni idea de quién se aloja realmente en su par de cientos de habitaciones. Así que cuando entras con aspecto de saber a dónde vas, nadie te hace preguntas. Dentro de los hoteles, siempre encontrarás los aseos más limpios.

Adaptarse a la nueva normalidad

La "nueva normalidad" es un término que se ha exagerado durante la pandemia de COVID, pero en realidad se aplica a cualquier nuevo estilo de vida al que te adaptes. Vivir en una furgoneta (o en una tienda de campaña) es totalmente diferente a vivir en edificios de hormigón con tuberías de agua, líneas eléctricas y retretes de verdad. Pero es algo que definitivamente puedes aprender si estás dispuesto a ajustar tus hábitos. Por el camino, aprendes todos los trucos para llevar una vida bastante cómoda en un entorno bastante inconformista.

Vivir la "vida de furgoneta" tampoco significa que estés obligado a quedarte en ella todo el tiempo. Una vez alquilamos un apartamento durante un par de días, sólo porque nos pareció una buena opción para el lugar donde queríamos quedarnos y nos dio la oportunidad de usar una ducha caliente de verdad. También nos duchamos una vez en el Airbnb de un amigo en Fuerteventura y lavamos la ropa en la lavadora de otro amigo en Lanzarote.

No obstante, adquirimos bastantes habilidades nuevas en el poco tiempo que vivimos la vida de campamento salvaje. Y lo que obtuvimos a cambio fue una sensación de libertad que probablemente nunca habríamos encontrado quedándonos en un hotel o Airbnb.

https://www.nakedwanderings.com/naturist-camping-with-an-eye-for-hygiene/